GOLPE DE ESTADO EN HONDURAS
El Ejército hondureño derrocó al presidente Manuel Zelaya con el apoyo de sectores políticos que rechazan los planes del mandatario de buscar su reelección y lo expulsó a Costa Rica, en un golpe de Estado que desató una fuerte condena mundial. En una incursión a la casa presidencial, a primera hora de la mañana, las tropas detuvieron a Zelaya para ponerlo en un avión que lo condujo a la capital costarricense. Después del golpe, los diputados aceptaron una supuesta “renuncia” de Zelaya a su cargo. En sesión extraordinaria los legisladores designaron al líder del parlamento, Roberto Micheletti, presidente interino. En una decisión posterior, el Congreso destituyó a Zelaya “por violaciones a la Constitución”.
“Llego a la Presidencia como producto de un proceso absolutamente legal”, dijo Micheletti, del Partido Liberal, en su toma de posesión. Aseguró que el Ejército sólo cumplió con la función que le ordenó la Corte. El primer anuncio de Micheletti fue un toque de queda por las noches y durante dos días a partir de ayer. El secretario privado de Zelaya, Eduardo Enrique Reina, dijo que la renuncia es falsa y acusó a Roberto Micheletti de maniobrar para sacar al mandatario del poder. El derrocamiento de Zelaya se dio luego de que éste despidiera la semana pasada al jefe del Estado Mayor porque se negó a ayudarle a organizar una consulta sobre la posibilidad de extender el mandato presidencial.
México recibió a la canciller de la República de Honduras Patricia Isabel Rodas Baca, quien junto con el presidente Felipe Calderón y la canciller de México, llegaron a la ciudad de Managua para la reunión del Grupo del Río en la que participaron mandatarios de países latinoamericanos. El Grupo de Río desconoció a Roberto Micheletti como presidente interino de Honduras y dejó en claro que el único gobierno legítimo de ese país es el encabezado por José Manuel Zelaya Rosales.
Con el presidente Felipe Calderón como secretario pro-tempore, el G-Río instó a las fuerzas armadas hondureñas a que se subordinen a su comandante en jefe y presidente constitucional, Manuel Zelaya y se convocó a una sesión extraordinaria para analizar la situación en Honduras tras el golpe de estado perpetrado en ese país. Asimismo, acordaron crear una comisión de representantes presidenciales para investigar crímenes y violaciones a los derechos humanos por parte de los golpistas y pidieron a la Asamblea General de la OEA adoptar soluciones "drásticas" .
Manuel Zelaya, acusó que el golpe de Estado responde a la "voracidad" de los grupos que manejan al país y anunció que volverá a cumplir el mandato que la gente le dio en las urnas. Ante los representantes y presidentes de 19 naciones, Manuel Zelaya, anunció que regresará a su país para recuperar el poder. “Voy a Tegucigalpa el próximo jueves después de Washington, regreso y voy a cumplir mi mandato de cuatro años”.
Zelaya relató su experiencia de cómo fue detenido por elementos fuertemente armados del Ejército y cómo lo expulsaron de su país para ser dejado en Costa Rica, donde lo recibió el presidente Óscar Arias. "Estaba en ropa de dormir", dijo, cuando los elementos del Ejército lo detuvieron. Al estar llamando por teléfono celular para reportar a una emisora lo que ocurría, contó, lo amenazaron para que dejara el teléfono, de lo contrario, le dispararían.
La respuesta de muchos países ha sido la siguiente:
México.- el Presidente Felipe Calderón sostuvo que el gobierno mexicano rechaza tajantemente el golpe de Estado ocurrido en Honduras y manifestó su solidaridad con el pueblo de aquella nación. "A nombre del gobierno y del pueblo de México, nuestro más enérgico rechazo al golpe de Estado ocurrido ayer en Honduras y refrendar nuestra exigencia de respeto al orden institucional, al orden constitucional, a las autoridades constitucionalmente electas y al presidente Manuel Zelaya". Venimos además a externar, añadió, nuestro respaldo al pueblo hondureño y al presidente Zelaya.
Cuba.- El presidente de Cuba, Raúl Castro, sostuvo que Manuel Zelaya debe regresar a la presidencia de Honduras de manera inmediata e incondicional, y se pronunció en contra de cualquier negociación en esta "batalla" por la justicia y la dignidad.
Venezuela.- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, criticó a Roberto Micheletti, a quien por el golpe de Estado y por erigirse como presidente de Honduras le llamó "Goriletti" , y advirtió que si le ocurre algo al embajador de su país será "causa de guerra" . Sostuvo que "si quieren que tomemos los fusiles, pudiéramos hacerlo, pero escogimos los caminos de la democracia y de la paz", y ante el anuncio de Micheletti de convocar a elecciones en noviembre, adelantó que no reconocerán a ningún gobierno que surja de un proceso electoral "montado" en un golpe de Estado. Asimismo, llamó a las fuerzas armadas de Honduras a desconocer a ese gobierno "tirano" y "títere" y levantarse a favor de Manuel Zelaya.
Ecuador.- Rafael Correa, dijo que la voluntad del pueblo hondureño es irrenunciable, por lo que debe continuar por la senda que se ha trazado; y llamó a que ante el golpe de Estado no haya "perdón ni olvido". Señaló que su país repudia la actuación de las cúpulas de las fuerzas armadas y los grupos fácticos de poder, a quienes llamó "usurpadores a la fuerza de la ley".
Bolivia.- Evo Morales, comentó en su oportunidad que esta reunión fortalece la lucha de los pueblos por la democracia y añadió que los problemas de cualquier pueblo en Latinoamérica no se resuelven tratando de acallar a las personas.
Unión Europea.- La Unión Europea acordó que no establecerán lazos con el gobierno impuesto por la junta militar en Honduras; las embajadas de Francia, Italia, Suecia, Alemania y España esperan indicaciones de sus países.
Estados Unidos.- Barack Obama, se mostró hoy preocupado por el golpe militar en Honduras y el exilio del presidente Manuel Zelaya, indicó la Casa Blanca. "Exhorto a todos los actores políticos y sociales en Honduras a que respeten las normas, el imperio de la ley y los principios de la Carta Democrática de las Américas"
Otras acciones que se tomarán es el retiro de embajadores de varios países, como México, y el cierre de fronteras, como lo han hecho por el momento Guatemala, Nicaragua y El Salvador.
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